Miércoles 4 de Junio 2014. Día 417.
No llevo un calendario, pero sé que es sobre estas fechas cuando mi amigo Iker falleció de repente . De repente, sin más, se fué. Ni enfermedades ni avisos, nada. Con proyectos en marcha, con ganas de hacer cosas, con la promesa de venir a un concierto, sin más se fué. Y tod@s nos quedamos devastados, poniéndole cara de tont@s a la vida.
Muchas veces recordar este triste episodio me da fuerzas para creer, para hacer que la vida tenga sentido, para escuchar a mi corazón. Y sin caer en el drama, que no tiene sentido, hacer todo esto hoy, porque “mañana” es algo que puede no suceder.
Con la pena velada por estos tres años que han pasado desde que Iker nos dejó, comparto el siguiente este vídeo que le dedicó su amigo Isidro Villo. Invitando no a la tristeza, sino a la reflexión sobre lo perecederos que somos, y cómo podemos vivir nuestra vida siendo realmente conscientes de su naturaleza. Así le hubiera gustado a él realmente.
Mi último correo dirigido a Iker fue en el 2013, quería saber qué tal le iba la vida y si seguía por Madrid o no.. pero no tuve respuesta..
Hoy es el día en el que me he vuelto a acordar de Iker, y he puesto su nombre y apellidos en google por si me diese alguna pista sobre él. Me esperaba encontrar su perfil en Linkedin.. pero nunca hubiese imaginado encontrarme su esquela..
Me he quedado realmente triste. 4 años sin saber nada de él.. y resulta que ya no está con nosotros. Así, sin más ni más.
Estuve en udalekus con Iker, en Zarautz, fue mi monitor, el mejor que he tenido nunca. Mientras estaba en campamentos mi amama falleció e Iker fue un verdadero apoyo para mí, siempre sacándome una sonrisa.
Fue por ello que quise seguir en contacto con él.. yo era una niña mokosa pero a medida que pasaban los años seguíamos en contacto a través del correo electrónico.. Fui creciendo y acabé trabajando de monitora durante 5-6 años.. luego acabé la carrera y empecé a trabajar en una empresa.. Nunca llegamos a cruzarnos de nuevo, sólo se cruzaban nuestros correos pero era suficiente saber que todo le iba bien y manteníamos la esperanza de que algún día volviésemos a vernos de nuevo.
Ahora entiendo porqué no tuve una respuesta..
Bihotz bihotzez besarkada haundi bat familia osoantzat.
Beti izango dugu Iker gure bihotzetan.
Me gustaMe gusta