Madrid, Jueves 1 de Mayo 2014. Día 452.
Tú sabes que te toca, te toca: pasar el aspirador, hacer ejercicio o… visitar (sonido: aullidos de monstruo deforme), visitar (sonido: la puerta chirría, una risa demoníaca te estremece)…. visitar I*K*E*A. Ikea pulp, Ikea pastoso, Ikea que te mola como queda una vez montado pero el “durante” … un “infiennno”.
En su interior, casas de 35 m2 con una distribución que nunca has visto en tu mundo, parejas discutiendo, tardar cuatro horas más de lo que esperabas y llevarte esa tontería inútil olvidando ese armario que tanto necesitas.
Este vídeo me sube los colores porque a nivel técnico es una patata, disculpas os pido por anticipado. Pero nada más pesadillesco que atravesar en el tren de la bruja el escenario de Ikea.
La cama que me compré me encanta, me encanta mi cuarto, pero se me ponen los pelos de punta cuando pienso en los pasillos de esta tienda.
Cambiar los entornos, más allá de lo que cueste. Hacer algún que otro sacrificio para encontrarnos mejor… yo me compré una cama alta y ahora me creo que vivo en un loft… llamadme loca, estoy genial en mi ” cuarto nuevo”.